Ritual de Bautismo

Descripción

Nueva edición para la Argentina

La Comisión Episcopal de Liturgia presenta una nueva edición del Ritual de Bautismo de Niños para nuestro país, fruto de un largo trabajo de revisión en el que se retradujo el texto íntegramente en base a la edición típica latina, respetándose la estructura general, sus capítulos, rúbricas y contenidos.

Como viene sucediendo con los otros libros litúrgicos, se han puesto las oraciones y textos coincidentes con la versión del Misal Romano aprobado para Argentina, como así también los textos bíblicos del Ritual concuerdan con el Leccionario aprobado para Argentina y los países del Cono sur.

En esta nueva edición del Ritual del Bautismo de Niños, se han incorporado las tres resoluciones que la Conferencia Episcopal Argentina en la Asamblea Plenaria de noviembre de 2009, ha legislado según prevé el mismo Ritual en las Preanotanda, n. 24, a saber: las posibilidades alternativas de la unción prebautismal, de la unción en la frente con el santo crisma y del rito del “efetá”.

Como ya es habitual en la Liturgia se asumió para la segunda persona del plural el nominativo “ustedes” y toda la conjugación de la tercera persona del plural en coincidencia con el uso normal de la lengua en toda Latinoamérica.

Dentro de las novedades de la edición se pueden destacar:

Se ha reemplazado la palabra “catequista” por “ministro autorizado”, para designar a la persona autorizada por el Obispo para la celebración del bautismo.
Se ha agregado el capítulo II: la celebración con un solo niño (de acuerdo con la edición típica).
Se ha agregado el capítulo III: la celebración para un gran número de niños (de acuerdo con la edición típica).
Se han preparado tres apéndices que se añadirán en la edición para Argentina a saber:
– Esquemas para la Liturgia de la Palabra.
– Presentación de los niños a la Virgen María.
– Cantos para la Celebración del Bautismo.

Con mucha alegría presentamos entonces este Ritual, que posibilitará que muchos niños y niñas de nuestro país experimenten lo que nos dice el Papa Francisco cuando afirma que “con el Bautismo, somos inmersos en esa fuente inagotable de vida que es la muerte de Jesús, el más grande acto de amor de toda la historia; y gracias a este amor podemos vivir una vida nueva, no ya en poder del mal, del pecado y de la muerte, sino en la comunión con Dios y con los hermanos”[1].